La influencia de la garnacha continúa por el valle del Ebro. En Navarra, la familia Ibáñez mantuvo la tradición iniciada por Jose María a su vuelta de Reims, aunque nunca consiguieron crear un proyecto de gran envergadura. Mitxel, tercera generación, creó la marca Basondoa para retomar la producción entre 1994 y mediados de los 2000 y la ha vuelto a revivir, ahora en sociedad con Imanol Lizarza, en la cosecha 2016. Trabajan con garnachas viejas de zona fría de proveedores de Lumbier (Baja Montaña) que cultivan en ecológico (el vino lleva la certificación correspondiente) con las que consiguen una burbuja pequeña, buenas texturas y ese punto vibrante que se mantiene en final de boca.
Fuente: https://www.spanishwinelover.com/disfruta-586-ano-nuevo-espumosos-nuevos